La IA en la industria alimentaria viene a comprobar, corregir y optimizar los productos contaminados, con presencia de elementos extraños, accidentes laborales… todas situaciones desagradables que se pueden encontrar fácilmente en las fábricas. 

Afortunadamente, el afianzamiento de tecnologías como la inteligencia artificial o IoT ha agilizado la mejora de los procesos de vigilancia y control para que esto no ocurra. 

Desde Datision te traemos 5 maneras de sacarle provecho a la IA en el entorno de la sanidad alimenticia.

5 formas en que la IA en la industria alimentaria puede trabajar optimizando procesos

Aunque en todos los sectores productivos la búsqueda de las mejores garantías sanitarias es una obligación, esta cobra aún más importancia cuando hacemos referencia al entorno alimentario. 

Descuidar este aspecto puede traer consecuencias muy negativas, tanto desde el punto de vista de la salud de los consumidores y trabajadores, como de la imagen de la empresa de cara a la sociedad y sus consecuentes pérdidas.

Estas circunstancias hacen que las fábricas de alimentos y bebidas estén muy pendientes de las soluciones tecnológicas que le ayuden a ser más eficaces a la hora de vigilar por la salud de todas las personas implicadas. En este artículo tenéis las 5 más comunes y efectivas.

1.- Evitar accidentes con mantenimiento predictivo

Son muchos los accidentes de trabajo que ocurren en las industrias cuyos equipos no se encuentran en óptimas condiciones para su funcionamiento. 

En estos casos pueden ocurrir desde fugas de líquidos o gases (tóxicos y/o a temperaturas extremas), impactos por desprendimiento de piezas, descargas eléctricas, vibraciones excesivas, atrapamientos y un largo etcétera de situaciones no deseables.

Para evitar que los equipos lleguen a estos extremos, es recomendable contar con soluciones de mantenimiento predictivo. 

Así, sus algoritmos de inteligencia artificial se anticiparán al mal estado de la maquinaria, alertando a los responsables de su cuidado para que actúen con adelanto.

2.- Cumplir con la distancia de seguridad y los aforos permitidos

En una sociedad en la que aún sigue vigente el control de asistencia a entornos cerrados para evitar contagios, las fábricas no están excluidas de estos hábitos sanitarios.

Soluciones de visión artificial o visión por computador, que combinan el uso de cámaras con inteligencia artificial, son capaces de detectar e identificar a cada operario o cualquier otra persona que accede al recinto. 

De esta manera, se facilita su seguimiento para asegurar de que cumple con la distancia de seguridad exigida, así como se tiene un control fidedigno y en tiempo real del aforo de las instalaciones.

3.- Predecir el crecimiento de agentes patógenos en alimentos

Los microorganismos suponen una importante amenaza para la seguridad de los alimentos, sobre todo en aquellos que tienen un procesado menos intenso, como los productos frescos. 

La listeria o la salmonella son algunos de los más conocidos y que aparecen con mayor frecuencia. 

Afortunadamente, existen herramientas basadas en tecnologías como IoT e inteligencia artificial que son capaces de detectar anticipadamente la aparición de estos patógenos.

Para ello, estudian las condiciones del alimento, especialmente los parámetros relacionados con el crecimiento de microorganismos, como pH, temperatura, humedad, conservantes empleados, atmósfera de conservación, etc. 

A partir de ellos se crea un modelo de datos que, tras el entrenamiento oportuno, será capaz de identificar qué alimentos están en riesgo y cuáles no.

De esta manera, además de garantizar la salubridad del producto, la empresa puede ahorrar un importante coste en análisis microbiológicos.

4.- Controlar la calidad del producto con visión artificial

Por otra parte, tampoco es extraño encontrarnos con noticias que nos hablan de elementos extraños encontrados en los envases de alimentos. 

Estos pueden ir desde lo puramente anecdótico e inocuo, hasta suponer un importante riesgo para la salud del consumidor. Por ejemplo, en el caso de que aparezcan pequeños elementos sólidos que puedan obstruir las vías respiratorias.

Para evitarlo, los ya mencionados sistemas de visión artificial pueden desplegarse para detectar in situ y en tiempo real el contenido de botes u otros envases transparentes. 

De esta manera identificarán inmediatamente estos contaminantes físicos.

Además, la visión por computador también tiene la capacidad de alertar sobre imperfecciones u otros defectos en la materia prima o a lo largo de la cadena de producción. 

Así, podrán desecharse automáticamente o derivarlos a otras líneas de producto (como es el caso de la fruta y los zumos).

5.- Fijar un sistema de trazabilidad integral

Pero la seguridad sanitaria en la industria de la alimentación va más allá de las propias instalaciones productivas. 

Las empresas deben preservar la salud de sus consumidores en todo momento.

Todos oímos hablar con cierta frecuencia de alertas alimentarias por alimentos que han sido comercializados en mal estado. 

Junto a estas alertas se muestran los lotes de estos productos potencialmente peligrosos para que quienes los hayan adquirido puedan devolverlos o desecharlos.

Esto no sería posible sin un sistema de trazabilidad que recoja fielmente cada paso que ha dado el producto desde sus orígenes como materia prima, hasta el consumidor. 

Una trazabilidad que se agiliza y optimiza enormemente con la recogida automatizada de datos en las líneas de producción gracias a sensores específicos, como los propios de IoT o Internet de las Cosas.

La IA en la industria alimentaria es el pilar que sostendrá a las empresas

Con estos 5 métodos, conseguirás un avance importante en el cuidado del bienestar de todos aquellos que estén relacionados, de una forma u otra, con tu negocio alimentario. 

Para saber cuáles son las opciones que mejor se adaptan a las particularidades de tu fábrica, no tienes más que tener una charla sin compromiso ninguno con nuestro equipo.